Su secreto
Cultivo y recolección
Cultivamos y recolectamos combinando métodos tradicionales con métodos innovadores e incluso tecnológicos.
Los perales no se riegan durante la floración, ni en los momentos previos a la cosecha ya que provocaría alteraciones a su calidad. El aclareo y la poda se realizan de forma manual. Así la relación de frutos en el árbol es la adecuada, aumentando su calibre y dulzura sin deteriorar la estructura y equilibrio de la fruta.
La recolección también se hace de forma manual. No se inicia hasta que se comprueba que el tamaño de los frutos, su color, resistencia al arranque y consistencia de la carne. Sólo se recolecta la pera libre de manchas o deformaciones y con el calibre mínimo marcado por el reglamento de la Denominación. El arranque del fruto se realiza justo en la intersección del pedúnculo con la rama, cogiendo el fruto de la base. El pedúnculo que queda en la fruta debe ser redondeado, de modo que no dañe al resto de los frutos.